EXTREMADURA EN OTOÑO: Guadalupe, Monfragüe, Yuste y Plasencia

El puente de la Constitución ha dado para una agradable escapada por la zona nor-oriental de Extremadura, extensa y bella región que brinda todo su esplendor paisajístico en otoño. A continuación expreso comentarios en relación al viaje:

• El Real Monasterio de Guadalupe. Conjunto monumental iniciado a finales del s.XIII, que merece una detallada visita. Se trata de uno de los más importantes centros devocionales marianos del mundo católico, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1993.
• La Hospedería del Real Monasterio de Guadalupe. Enclavada dentro del propio conjunto arquitectónico, alrededor del claustro gótico del s.XVI. Habitaciones austeras pero cómodas, destacando especialmente lo apacible del entorno.
• La localidad de Guadalupe. Hay bastante pueblos en Extremadura más interesantes, pero se deja ver, tiene un agradable paseo por sus calles.
• Las comarcas de Las Villuercas y Los Ibores, con paisajes muy interesantes pero, todavía más, lo son sus embutidos y quesos de cabra. Recomendable en la localidad de Deleitosa (el nombre ya sugiere algo) detenerse en la tienda de la empresa Embutidos Ibéricos Sierra de las Villuercas. Por internet te mandan lo que quieras a tu casa.
• El Parque Nacional de Monfragüe. De gran belleza paisajística, cuenta con numerosas rutas y, sobre todo destaca por albergar una de las colonias de buitres (negro y leonado) más importantes de Europa, especialmente por los alrededores del Salto del Gitano.
• Cuacos de Yuste. Localidad famosa porque a 1.5 km se encuentra el Monasterio de Yuste, además de ser por donde hacía sus correrías infantiles Don Juan de Austria, hijo ilegítimo de Carlos I. Le llamaban Jeromín. El conjunto urbano está cuidado con rincones muy bonitos.
• El Cementerio Alemán de Cuacos de Yuste. En el camino de acceso al monasterio. Alberga los restos de 182 aviadores, marinos y submarinistas alemanes, que llegaron sus cuerpos a distintos puntos de las costas españolas en la 1ª y 2ª Guerra Mundial. Impresionante ver, paseando entre las cruces, que la edad media de todos ellos no es muy superior a los 20-22 años. Cosas tremendas de las guerras.
• El Monasterio de Yuste. Lugar de retiro hasta su muerte del emperador Carlos I de España y V de Alemania. Iniciado en el siglo XIV. Considerado por la Unión Europea en 2007 como Patrimonio Europeo. Muy interesante, especialmente los claustros y la Casa-Palacio, expresamente construida para el emperador y donde vivió sus últimos dos años.
• El hotel rural Abadía de Yuste, en Cuacos de Yuste. Una buena elección. Toda su decoración y mobiliario de época, reproduciendo su arquitectura de patios y jardines una típica plaza de la comarca de La Vera. Muy cómodo y con un restaurante que hace los honores a los productos de la tierra.
• Jarandilla de la Vera. Interesante pueblo de la comarca que le da nombre, que cuenta con calles típicas y el actual parador de turismo, que es el antiguo castillo-palacio de los Condes de Oropesa, donde Carlos I vivió unos meses a la espera de que le terminaran de acondicionar su casa-palacio de Yuste. Coincidimos con la Fiesta de los Escobazos, curiosa muestra de fervor religioso-pastoril, propia de la localidad.
• La carretera entre Cuacos De Yuste y Plasencia por el Puerto del Piornal, pasando por Garganta la Olla. Conecta la comarca de La Vera con el Valle del Jerte. Conducción de montaña con magníficas vistas y tranquila soledad, atravesando espléndidos bosques de quejigos y otros robles. Quizás por el otoño, con las hojas caídas y las desnudas ramas sobre el cielo, ha sido una de las rutas más bonitas, en coche, que he hecho en los últimos años. 
• Plasencia. Localidad muy monumental que merece otra visita al no poder entrar a sus principales monumentos por festividad y huelgas. Otra vez será.

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